Hacerse ecografías se ha vuelto algo de lo más natural para cualquier embarazada e incluso imprescindible. Es increíble como la tecnología con la que contamos actualmente, sirve de mucho para conocer a los pequeños desde el útero materno. Sin embargo, esto no quiere decir que no haya quienes se pregunten si esto es seguro para un bebé. El día de hoy te desvelamos las inquietudes más comunes de las madres primerizas respecto a una ecografía y porque no deberías alarmarte por ellas.
¿Por qué hay quienes temen a las ecografías?
No es que las mismas tengan algo de malo, sino todo lo contrario. No obstante, como se trata de un proceso que involucra ultrasonido o bien ondas acústicas, a varias mujeres les surge el temor de que los mismos puedan llegar a afectar a sus bebés a través del vientre.
Afortunadamente hay que decir que no existe riesgo alguno, pues se ha comprobado que nada de esto es dañino para un feto en crecimiento. Incluso se sabe que el líquido amniótico que se encuentra dentro de la zona uterina, es una protección natural y muy efectiva que lo mantiene a salvo, mientras recibe estímulos del exterior.
Cualquier duda que te surja respecto a este procedimiento, siempre la puedes consultar con tu ginecólogo, que se encargará de responder todas tus preguntas.
¿Cuántas ecografías hay que hacerse en el embarazo?
Lo normal en las embarazadas es el médico les indique hacerse alrededor de unas cinco, para observar el progreso de sus bebés. Empero, la situación cambia cuando estamos hablando de un embarazo de alto riesgo.
En este caso se necesita llevar una observación mucho más detallada, por lo que lo más probable es que las ecografías se repitan con mayor frecuencia, dependiendo de lo que diga el ginecólogo. Esto también es usual cuando se esperan gemelos.