Aceptar un compromiso con la pareja es uno de los pasos más importantes que una puede dar en la vida, pero no todas están listas para hacerlo. A veces, puedes dejarte llevar por las razones equivocadas sin saber realmente que es lo que esperas de tu relación o si de verdad quieres pasar el resto de tus días con esa persona. ¿Estás dudando y no sabes si deberías echarte atrás o no? Estas señales te ayudarán a averiguarlo.
- Tienes miedo de pensar en el futuro. No te causa expectativa ni emoción, sino todo lo contrario. Con frecuencia evades el tema e intentas convencerte a ti misma con cosas como «pasará lo que tenga que pasar».
- Hay errores que todavía no superan. Como una infidelidad por ejemplo, algo que piensan que quedó en el pasado pero todavía los sigue lastimando. El compromiso no debe ser la solución a cosas como esta.
- Con frecuencia hay celos entre ustedes. Puede ser por parte de ambos, tuya o de él. Este sentimiento es algo muy destructivo y si ocurre con frecuencia, debería hacer que te preguntes si de verdad vale la pena vivir así toda tu vida.
- No se han puesto de acuerdo sobre tener hijos. Esto no es algo que deban dejar para después. Si desde el principio tú quieres tener hijos y él no o viceversa, deberían separarse porque este aspecto nunca dejará que su matrimonio funcione como debe.
- Pelean demasiado a menudo. Y por las cosas más insignificantes o tontas, aunque después se vuelvan a reconciliar. Cuidado, porque este patrón no es saludable en ninguna pareja.
- Sus familias tienen problemas. No importa que digan que ambos irán contra sus familias, si no están dispuestos a dejarlas atrás para funcionar como una pareja independiente, más adelante podrían fracasar por culpa de terceros.