Últimamente, muchos nutriólogos y doctores recomiendan más que nunca buscar alternativas vegetales para la leche convencional; que si bien nos brinda importantes vitaminas y minerales como el calcio, a la larga también se puede volver más difícil de digerir para el organismo, debido a las enzimas que residen en ella. En cambio, las leches orgánicas hechas a base de semillas, como las almendras por ejemplo, son más livianas y nos aportan muchos más beneficios. En el artículo de hoy en concreto, te hablaremos sobre una clase muy especial de esta bebida, que deberías considerar incluir en tu alimentación gracias a sus ventajas: la leche de soja.
Dentro de los principales puntos positivos que puedes conseguir con su consumo, vale la pena mencionar los siguientes:
- Está libre de lactosa. La lactosa se ha convertido en un verdadero problema para quienes sufren de intolerancia. Al mismo tiempo, su carencia de la misma hace que sea más fácil de digerir y evita numerosos problemas gastrointestinales.
- No contiene químicos, ni hormonas. Al ser un producto 100% natural, puedes tener la seguridad de que no ingresarán a tu organismo agentes que te causen malestar o desórdenes hormonales, que interfieran con las funciones de tu cuerpo.
- Combate el colesterol y otras grasas malas. La leche de vaca llega a tener grasas saturadas que afectan al corazón. Pero con la de soya esto no ocurre, ya que sus proteínas de hecho combaten los triglicéridos y la grasa que no necesita el sistema cardiovascular.
- Es una gran fuente de proteínas. Estas últimas son necesarias para el desarrollo de tejido muscular, que a su vez te ayudará a quemar grasa más rápido. También son estupendas para mantener saludables a los riñones y otros órganos corporales.
- Es rica en antioxidantes. Gracias a las isoflavonas que podemos encontrar en la leche de soja, el cuerpo se siente más rejuvenecido y se retrasa el envejecimiento celular.