¿Quieres lanzar un proyecto web paralelo al que ya tienes, pero no sabes por dónde empezar?
Inicialmente no está claro qué fases del proceso de lanzamiento son más importantes que otras. Es por eso que en este artículo, compartiremos lecciones útiles para el proceso de creación de un producto. Espero que puedas tomarlo como punto de partida o inspiración y crear algo a medida solo para ti.
1. Mantén actualizado un cuaderno de problemas
Muchos llevan un cuaderno de ideas, pero yo recomendaría llevar un «libro de quejas»: uno con problemas y errores que te resulten interesantes de resolver. Puede ser un tablero kanban con varias etiquetas: diseño, social, seguridad, etc. Con estas etiquetas, sé qué problema podría resolverse fácilmente con una nota post-it y cuál podría resolverse con una aplicación inteligente. Miro este tablero con frecuencia y lo mantengo diligentemente; me dice cuál es mi prioridad actual y cuál es mi próximo objetivo a largo plazo.
2. Conócete a ti mismo primero
Si eres como yo, tu libro de quejas es extenso. Para descubrir en qué vale la pena dedicar tiempo, comencemos con el por qué. ¿Por qué quieres crear un producto?
Estas pueden ser algunas razones:
- Un gusto por ayudar a las personas y escuchar sus dificultades diarias para obtener diferentes perspectivas de la vida.
- Obtener la alegría que produce crear cosas. La satisfacción de crear algo propio es mucho mayor que cualquier trabajo nuevo y brillante o un salario enorme.
Luego pregúntese por qué limitar tus selecciones. Por ejemplo, si te fascinan las nuevas tecnologías y las posibilidades que ofrecen, tal vez te entusiasme una aplicación de cámara con funcionalidad AR abierta. Elijas lo que elijas, empezar por comprender tu causa te ayudará a sentirte menos abrumado.
3. Concepción y diseño
Una vez que tengas un problema que abordar y suficiente conocimiento sobre el problema, es hora de idear la solución. Durante la ideación, el único objetivo es generar tantas soluciones como sea posible sin juzgar.
Una vez que hayas decidido un enfoque, puedes empezar a escribir las ideas y dibujar esquemas. Dado que estos dos últimos pasos requieren un camino claro, trata de resolver todas las dudas y preguntas con antelación.
4. Plantillas y marcas de alta fidelidad
Es importante prestar mucha atención y dedicación al diseño visual y marca. Muchos dirían que es innecesario, pero una buena primera impresión y una marca consistente tienen valor. Además, al diseñador que hay en mí le gusta mucho esta parte.
Si no tienes conocimientos de diseño o el tiempo para realizarlo, para diseñar de manera eficiente, recomiendo contratar a un profesional del diseño que se haga cargo y supervisar que el trabajo se esté realizando de acuerdo al concepto que se esté buscando.
5. Codifícalo
Cuando se trata de desarrollo, creo que nadie codifica un gran código en el primer intento. Si bien lleva mucho tiempo, un enfoque iterativo a veces funciona mejor. Puedes empezar escribiendo una aplicación funcional (con un código terrible) para demostrar el concepto. Después de eso, jugar con el resultado final y pensar en cómo puedo hacerlo mejor. Al final, tachar todo y reescribirlo, esta vez teniendo en cuenta la calidad y la mantenibilidad. La segunda iteración debería dar como resultado un código de mejor calidad.
Este mismo proceso puede aplicarse en proyectos que no requieran programación, siempre es importante trabajar con borradores en los que ir incluyendo nuevas ideas a las que después se les dé forma.
También existen numerosas herramientas hoy en día que te ayudan a iniciar nuevos proyectos web.
6. Corre la voz
Aparte de todas las estrategias de marketing habituales, es eficaz simplemente decirle a alguien cómo le beneficiaría tu producto o servicio. Con eso en mente, es crucial centrarse en estas cosas:
- Una presentación clara del producto.
- Vídeo demostrativo de cómo el producto puede ayudar a las personas.
- Sitio web de marketing con una lista de funciones y preguntas frecuentes.
- Documentación.
- Recursos promocionales consistentes y de alta calidad para diversas plataformas, como redes sociales, sitios web y correo electrónico.
Cuando las personas están confundidas acerca de tu producto, siguen adelante. Sé lo más honesto y claro posible: ¡así darás una mejor imagen con la gente!
Conclusión
Todos tenemos algo dentro que nos gustaría compartir con el mundo: puede ser una idea, un proyecto o un talento. No dejes que el síndrome del impostor te paralice. Lo más probable es que estés listo para crear algo propio. Agrega algo al mundo que solo tú puedas implementar.