El maquillaje se ha vuelto una parte indispensable de la rutina de un montón de mujeres, pero hay veces en lo que lo más conveniente es dejarlo, en especial cuando su uso nos acarrea ciertos problemas que se vuelven difíciles de combatir con su abuso y que provocan que te sientas menos bella. Si tú eres de las que consideran que no pueden vivir sin sus cosméticos, definitivamente deberías prestar atención a la siguiente lista y ver si alguna de estas situaciones no está ocurriendo contigo.
- Presentas serios problemas de acné. Si bien el maquillaje puede ayudarnos a cubrir las imperfecciones, usarlo todos los días y en exceso solo tiende a obstruir los poros y empeorar el problema. Es importante que te desmaquilles en las noches y también un día o dos a la semana, para dejar descansar tu cutis.
- Las pestañas se te han empezado a caer. Si notas que tus pestañas no son tan abundantes como antes, definitivamente deberías revisar tu máscara. A veces la forma del cepillo o la fórmula de algunas no es la más adecuada y provoca la caída de pestañas, o irritaciones en los ojos, que son muy sensibles.
- Tu piel está demasiado reseca o con alergias. La piel es un órgano muy sensible que necesita respirar, y usar base de maquillaje a diario no ayuda mucho en este cometido. Además de desmaquillarla, conviene que te apliques una buena crema hidratante todas las noches y que descartes reacciones alérgicas; primero aplicando un poco de tu nuevo maquillaje encima de áreas pequeñas a manera de prueba.
- Tienes heridas en los labios. El herpes labial, puede ser ocasionado por labiales de mala calidad y que contienes químicos tóxicos, que abren heriditas en la piel y la maltratan. Por eso comprar los más baratos no siempre es una buena decisión.
