Algo que es muy común por estas fechas, (y de nada sirve querer negarlo), es comer de más en la cena de Navidad, las posadas y la celebración de Año Nuevo que ya se aproxima. Simplemente vemos la mesa llena de cosas tan deliciosas, que no queremos quedarnos sin probar nada. El problema viene a la mañana siguiente, cuando nos levantamos y sentimos la horrible sensación de pesadez por habernos emocionado con la comida. ¿Cómo se debe actuar en una situación así? Esto es lo que debes hacer.
- Primero que nada, bebe agua natural. Estar hidratado ese esencial, sobretodo si también ingeriste bebidas alcohólicas. Apenas te despiertes, bebe un vaso de agua y procura estar hidratándote a lo largo del día. Esto acelerará tu digestión y te ayudará a deshacerte de esas calorías de más que siguen causando estragos en tu cuerpo.
- No te saltes las comidas. Sabemos que después de haber comido de más, lo último que quieres es volver a probar bocado, pero tienes que saber que eso no te ayudará en absoluto. Si vas a desayunar, mejor opta por ingerir algo con mucha fibra, como un plato de avena o un par de tostadas integrales. No hay nada mejor para favorecer la digestión.
- Desintoxica tu organismo. A la fibra le puedes agregar algunas frutas frescas o un batido natural hecho con vegetales verdes, pues son cosas que están llenas de vitaminas y minerales, y hacen un trabajo excelente retirando las toxinas del organismo. Las que más te recomendamos son la papaya, la toronja, las espinacas y el chayote.
- Estira tu cuerpo. Si quieres que tu cuerpo vuelva a la normal cuanto antes, nunca está de más hacer unos etsiramientos para que se ponga activo. Y si puedes salir a correr o a caminar un poco, mucho mejor.