¿A quién no le gusta el helado? La mezcla de leche, hielo, azúcar y sabores, crean una deliciosa combinación que podemos disfrutar en cualquier momento. Parece difícil hacer nuestros propios helados caseros, pero siguiendo los consejos a continuación se pueden elaborar fácilmente con un resultado perfecto.
- Un helado bien hecho se caracteriza por ser esponjoso. Mientras más esponjoso, la paleta se deslizará con más facilidad por la mezcla, obteniendo una bola ligera; esto se logra con un buen bombeado de aire. Debemos introducir aire en la mezcla ya sea con el batido manual o con máquina heladora.
- Hay que seguir las instrucciones de la maquina de helado que que piensas usar. Antes de comenzar a cocinar, debes familiarizarte con el aparato a utilizar, sea eléctrico o de manivela.
- De 5 a 0 °F es la temperatura ideal para almacenar los helados. Mientras más rápida es la congelación, más suave será la textura del helado.
- El azúcar y el jarabe, son anticongelantes naturales. Cuanto mayor sea la proporción de edulcorante, más lento se congelará la mezcla, mejorando su textura.
- El secreto para evitar los cristales de hielo es, añadir un sobre de gelatina sin sabor a la mezcla por 6 tazas de helado. Antes de añadirla, debe estar previamente diluida en agua.
- Como regla general, llenar la máquina de hacer helados no más de dos tercios de su capacidad para permitir espacio para la expansión.
- Al guardar la mezcla de helado, debe estar cubierta para que no absorba otros olores del refrigerador.
- La leche en polvo absorbe diez veces su peso en agua, lo que se traduce en menos cristales de hielo para el helado. La nata, las yemas de huevo y la mantequilla también cumplen con el mismo propósito haciendo que se obtenga una textura más cremosa.
- Si usarás una máquina que tiene hielo por los lados, deja reposar 3 por tres minutos antes afuera del congelador de comenzar.
