Es difícil darnos cuenta de que nuestros hijos comienzan a comportarse de una manera agresiva, llegando a lastimar a niños cercanos a ellos o incluso a alguien de la familia. Lo que en un principio podría tomarse como una conducta de rebeldía, puede ocultar muchas más cosas de las que te imaginas y en realidad ser un grito de ayuda. Normalmente, cuando un chico es agresivo es porque necesita canalizar sus emociones y la única manera en la que puede hacerlo es mediante comportamientos violentos, porque no ha recibido la suficiente atención en casa o bien, porque se encuentra pasando por un momento difícil en la escuela o el hogar.
¿Cómo evitar criar niños violentos?
Algunos consejos que son útiles a la hora de tratar con esta clase de conducta, son las siguientes:
- Abrir un canal de comunicación. Escuchar a tus hijos es la mejor manera de prevenir y detener cualquier comportamiento que sea destructivo, tanto para ellos como para quienes les rodean. Si algo les molesta o los preocupa, ellos tienen que saber que pueden contar contigo para solucionarlo y que tú antes de castigarlos, vas a hacer todo lo que puedas por ayudarlos.
- No educar a base de golpes, ni violencia física. Todo lo que los niños hacen lo aprenden en casa. Si viven en un entorno en donde todo lo que reciben son malos tratos, no se puede esperar que se comporten bien cuando están fuera del hogar. Es indispensable saber enseñarles lo que está mal sin recurrir a golpes o sin gritarles. Ellos son inteligentes y una explicación basta para que comprendan.
- Poner atención a su entorno. En ocasiones, un niño tiene demasiado miedo de contar sus problemas porque está siendo intimidado por alguien, ya sea un chico de su misma edad o un adulto. Por esto no le queda de otra que expresarse agresivamente. Lo mejor que puedes hacer es estar atento a cualquier señal de problemas cercanos a él.
- No fomentes la violencia en casa. Los chicos son como esponjas y aprenden todo lo que ven de sus padres. Debes mostrarles que la agresión no es la solución a ningún problema. No los aplaudas si dicen groserías, si hablan mal de alguien o pretenden ser «valientes» peleando.
- Haz que canalice su ira en algo constructivo. A veces los niños necesitan desquitar sus sentimientos, pero no saben como. Hacer que practique deportes o alguna actividad artística, puede enseñarle que no necesita ser agresivo con otros para lograrlo porque cuenta con cosas mejores.
- Enséñale a distinguir la fantasía de la realidad. Aunque no lo creas, lo que los más chicos ven en medios como la televisión o el Internet, los puede conducir a mostrar conductas violentas. Es muy importante que estés al tanto de lo que el tuyo mira y le expliques lo que está bien y lo que no.
- Muéstrale lo que es estar en los zapatos del otro. Tu hijo debe reflexionar en lo que sentiría él si alguien lo insultara o lo lastimara físicamente. Hazle pensar en ello y pregúntale si le gustaría experimentar ese tipo de situaciones. De esta manera lo pensará mejor la próxima vez que quiera mostrarse violento.
La crianza de los niños nunca va a ser algo sencillo y desafortunadamente, los problemas de bullying que se dan en tantas escuelas y hasta fuera de ellas son el mejor ejemplo de eso. Mucho se ha hablado acerca de como deberíamos proteger a nuestros hijos para que no se vuelvan víctimas de este fenómeno, pero ¿qué sucede cuando pueden volverse los victimarios? Un chico violento necesita tanta ayuda como quienes suelen ser blanco de sus acciones y es por eso que también conviene prevenir que sea de esta forma. Estas fueron solo algunas medidas para lograrlo.
Señales para identificar tendencias violentas en los niños
Identificar la agresividad en los niños es algo de suma importancia, no solo para evitar que tengan conflictos con otras personas, sino también porque la violencia es un síntoma de problemas no resueltos que pueden estarles afectando. Estas son las señales a las que deberías prestar atención en caso de que sospeches que tu hijo o algún chico cercano a ti, se encuentre en una situación como esta.
- Juegan de manera demasiado brusca. Los niños agresivos suelen olvidar el límite entre lastimar a alguien o jugar con él. Suelen manifestarlo cuando están con otros chicos, por medio de patadas, golpes, mordidas o arañazos, que justifican diciendo precisamente que solo están jugando. Es primordial hacer que comprendan la diferencia entre jugar y agredir a otra persona.
- Se enojan con facilidad. Por lo general actúan de manera desproporcionada ante situaciones ante las que no habría que exagerar, como por ejemplo, cuando les piden que recojan sus cosas o que te ayuden con alguna tarea. Si bien muchos pequeños podrían reaccionar con fastidio, los que tienen problemas de conducta irán un paso más allá.
- Manifiesta la violencia en sus juegos. Cuando está jugando solo con sus juguetes, puede que los use para manifestar parte de su conducta, tratándolos con brusquedad o inclusive haciendo que sus muñecos «se comporten» del mismo modo que él. Puede que también sienta bastante interés por aquellos juegos donde haya cierto grado de violencia.
Lidiar con un comportamiento agresivo puede ser difícil, más no imposible. Si sospechas que tu hijo es más brusco de lo normal, habla con él y demuéstrale porque es preferible que se modere en sus actitudes. Si el problema persiste y notas un humor negativo, lo más conveniente será buscar la ayuda de un profesional para canalizar esos sentimientos.
