El sobrepeso es uno de los grandes males de nuestro tiempo, llegando a afectar de manera grave a personas de todas las edades y estratos sociales. Se ha vuelto tan importante mantener una alimentación balanceada, que constantemente miramos este hecho como la principal recomendación para perder esos kilos de más, junto con la de hacer ejercicio.
No obstante, para una persona que se encuentra lidiando con la obesidad esto pudiera no ser suficiente. En primer lugar, porque muchas veces es necesario enfrentarse a un problema de origen genético para poder adelgazar y en segundo, porque las emociones que van de la mano con esta enfermedad, pueden ser un gran obstáculo a vencer en esta situación.
¿Te sientes identificada con lo que acabamos a mencionar o recuerdas a alguien que pudiera hacerlo? En ese caso, es muy conveniente que tomes en cuenta algunas medidas extra que pueden servirles de apoyo.
- Acude con un psicológo. Aunque nos cueste aceptarlo, a veces es necesario terminar primero por restricciones que cargamos en el subconsciente o desde la infancia, para empezar a transformar nuestro exterior.
- Usa la visualización creativa. Esta técnica consiste en pensar de manera positiva y con todos los sentidos, en algo que realmente deseas obtener. Si quieres tener un cuerpo delgado, siéntete como si ya lo tuvieras, imagina que es así y agradece todos los días por la pérdida de peso.
- Busca una red de apoyo. Tu familia y amigos, pueden contribuir a que tu transformación sea más efectiva. Hagan ejercicio en compañía los unos de los otros o realicen compras saludables, para que te sea más fácil modificar tu estilo de vida.
- Realiza actividades que te distraigan y te hagan sentir bien. Leer un libro, ir al cine o a clases recreativas, son buenas maneras de distraerte de la comida sin necesidad de estarte ejercitando todo el tiempo.
